lunes, 23 de julio de 2012

Crónica trasguil del Celsius 232


Llegamos a Avilés, una ciudad preciosa con un tiempo de lo más agradable, el jueves por la tarde. Antes de entrar en harina, quiero destacar que quedé prendado del paisaje asturiano, similar al vasco en muchos aspectos y perfecto para un enamorado del verde y las montañas; hizo que el último tramo del viaje fuese un regalo para la vista. Habiendo escrito El Rey Trasgo con esta orografía en mente para una de las localizaciones fundamentales de la novela -la norteña nación de Esidia-, saber que iba a llevar a cabo la primera presentación rodeado de tanta belleza fue una sensación increíble. Una vez llegados a la ubicación del festival Celsius 232 -que incluía varios stands y casetas para las tiendas, una carpa de actividades, un auditorio y un parque cercano-, después de asistir un rato al encuentro con Peter Berling y repartir saludos de izquierda a derecha a un montón de amigos y profesionales, cenamos en las inmediaciones y descansamos de cara al día siguiente.

Asturias, una región preciosa. Me muerto de ganas de volver.

La presentación de la editorial Kelonia contó con la presencia de los editores Carmen Cabello y Sergio Alarte, Bárbara Hernández -autora de la portada- y yo. Durante veinte minutos desgranamos cuáles son los objetivos de Kelonia, cuál es el papel que aspira a llevar a cabo en el panorama editorial español, las obras publicadas y las que están por venir, su método de trabajo y de selección de manuscritos, el mimo puesto en la maquetación de las obras y la libertad otorgada al autor, entre otros muchos puntos. Tanto Carmen como Sergio saben ser cercanos en cualquier circunstancia y Bárbara contribuyó con su perspectiva sobre la elaboración de la portada. Yo, como no podía ser de otro modo, me centré en el gran trabajo hecho en la edición de El Rey Trasgo -con estupendos encabezados, separadores personalizados que se adaptan, al igual que las letras capitales, a las dos tramas de la novela, un aspecto despejado que facilita la lectura...- y en la excepcional comunicación que se mantiene entre autor y editorial.

Presentación de la Editorial Kelonia, rodeados de hermosos pósters.

Una vez concluida, llegó el momento de presentar El Rey Trasgo. No sabía qué decir. Me había pasado buena parte de la mañana elaborando y descartando distintas ideas, como un dibujante que no dejase de lanzar esbozos a la papelera a los dos trazos. La noche anterior un dolor de cabeza estuvo a punto de hacer que me tirase por la ventana hasta que un baño, una aspirina y el apoyo de mi pareja obligaron a mi cerebro a colaborar. Mientras se repartían los números para el sorteo de los pósters, esperaba sentado la llegada de mi presentador, mirando en derredor al público. Mis padres. Mis amigos. Compañeros y conocidos. Muchas caras nuevas. Glups. La llegada de Diego García Cruz confirmó que no había escapatoria, así que respiré hondo y dejé que los acontecimientos saliesen como quisiesen salir.

Y ey, todo fue la mar de bien. Diego -Hermano Traductor- condujo la presentación con soltura, haciendo observaciones inteligentes sobre distintos puntos de la novela, dándome pie a explayarme con detalles que de otro modo hubiese encontrado difícil sacar a colación, ayudándome a dibujar un retrato claro de esta novela imposible de resumir. Le estoy muy agradecido por su apoyo, al igual que a Bárbara, cuyos comentarios sobre las diferencias entre las dos imágenes (la de Óscar Pérez y la suya) fueron tan acertados como interesantes. Yo apenas me oía hablar: recibía una pregunta o un comentario que continuar y respondía aquello que consideraba más apropiado, tratando de tomarle el pulso a los asistentes a través de sus reacciones, expresando con honestidad aquello que he aspirado a hacer y los motivos que me llevaron a hacerlo así. Tengo muchísimos "fotogramas" de aquellos veinte minutos eternos grabados a fuego en la memoria, pero serían demasiados como para comentarlos todos. A todos los asistentes: gracias.

Presentación de El Rey Trasgo. Bárbara permanece alerta ante
cualquier spoiler, lista para cercenar la cabeza de quien lo suelte.

Después de la presentación y el sorteo de los pósters (enhorabuena a los ganadores) tuvo lugar la firma de ejemplares: agotamos los ejemplares que habíamos dispuesto para la librería, teniendo que incorporar aquellos que habíamos traído en el coche, y durante dos horas estuve dibujando y dedicando con una sonrisa en los labios. Hubo reyes trasgo sintiendo el viento en las palmas de las manos, escudos heráldicos, trasgos-zombi, trasgos-Batman, wyvernas, Ciudadelas y montañas, un trasguete apremiando a George R. R. Martin a firmar con más esmero e incluso un divertido retrato de Tobías, personaje trágico convertido en atractivo gigoló de cumpleaños. Juan Díaz me acompañó en todo momento con su cámara -no puedo agradecerle lo bastante su apoyo constante, el tiempo dedicado a retratar la sesión de firmas y su esmero-, dedicó algunos de sus excepcionales marcapáginas y hasta acompañó una de mis dedicatorias con la suya. Bárbara, después de firmar el póster de la portada, dedicó ejemplares con el estilo inimitable de su cómic Viñeteando, que cuelga en Facebook. Son una pareja de personas maravillosas a las que debo mucho. Gracias a los dos.

Tobías es un personaje trágico, un retrato del amor romántico hecho trizas,
del aislamiento y la soledad, de las rémoras emocionales y las heridas que nunca curan.
Y tiene un culo sobre el que se pueden partir nueces, al parecer.

Después de una tarde relajada echando un vistazo a la clase de espada de mano y media impartida por la EscuelaAsturiana de Esgrima Antigua -aproveché para agradecerles su difusión de esta increíble disciplina, ¡practicadla si tenéis la oportunidad!- y jugar una partida a Los Lobos de Castronegro -descubrimos que es mucho más divertido cazar brujas que lobos-, los socios de la Federación Española de Fantasía Épica concretamos algunos aspectos sobre la Imagicón de Urnieta y los Premios Fénix, que se anunciaron al día siguiente y se especificarán en breve a través de la web de la Federación. Ambos son proyectos muy ilusionantes, en los que se unen pasión, experiencia y dedicación: aún hay muchas, muchísimas novedades por anunciar, pero a medida que vayan produciéndose estoy seguro de que cada vez más personas se sentirán tentadas de subir al País Vasco para disfrutar de una experiencia irrepetible para todos, como ya lo fue la anterior Imagicón.

A la tarde, más dibujos. Este es un trasgo medio Aerys Targaryen,
medio Robert Baratheon, dos hombres a los que admiro mucho.

Al día siguiente participamos temprano en la charla "Evolución de las sagas de fantasía: de Cimmeria a Invernalia", enmarcada dentro de la estupenda AsturCon. De esta conferencia me gustaría destacar la participación de los asistentes, que siempre enriquecen esta clase de eventos, y del ambiente tan excepcional que reinó durante una hora que se hizo demasiado corta. Se crea un ambiente especial cuando aficionados y profesionales (Víctor Conde se contaba entre el público y participó activamente en la charla) se encuentran cómodos hablando de aquello que les apasiona, intercambiando detalles y diseccionando los mil y un aspectos que rodean a la situación de la literatura fantástica desde sus orígenes hasta la actualidad. Carmen contribuyó con un estupendo análisis del fantástico en España, Sergio aportó detalles jugosos para entender mejor la labor de los distintos autores y yo hablé de gente cayéndose por un precipicio, la ausencia de Tom Bombadil en las películas de Peter Jackson y de un Hitler vampiro salvando la literatura de género. No preguntéis.

"Y por eso creo que el sistema de gobierno propuesto por Sauron
es objetivamente mejor que los caducos y segregacionistas regímenes
de las mal llamadas Razas Libres. ¿Preguntas?"

Más tarde ese mismo día asistimos a la presentación de El Yelmo del Caballero, de Sergio Alarte con David Mateo. En un ambiente distendido, Sergio dio detalles de su obra y reveló que está trabajando en una segunda parte, movido por los ánimos de los lectores a retomar su historia sobre el continente de Aru. Inmediatamente después se anunció la Imagicón de Urnieta a cargo de la delegación de El Bastión del Fénix y el vicepresidente del Oráculo del Fénix: se concretaron fechas, se anticiparon actividades y se anunciaron los premios Fénix, que harán de la transparente participación de profesionales y expertos su bandera con la vista puesta en convertirse en unos galardones de referencia en literatura, ilustración, rol, y muchos más formatos relacionados con la fantasía. Los detalles no tardarán en salir a la luz y creedme, tenemos cosas muy interesantes guardadas en la nevera, así que permaneced atentos.

Ya veréis qué ases tienen guardados en las mangas, ya...

A la tarde asistimos a la conferencia de Guillem López, "El budismo Zen y la Guerra de las Galaxias", una ponencia original e interesante, hilada con maestría, que tuvo al público en la tatuada mano del autor. Por último partimos en autobús a la Espicha, la cena de clausura del evento. Rodeados de tapas y sidra, los asistentes pasamos una noche inolvidable en la que charlamos todos con todos, nos divertimos y cantamos El oso y la doncella en presencia del autor como si no hubiese un mañana. La juerga continuó de regreso a Avilés hasta las seis de la mañana, cuando el cerebro empezó a advertirnos de que si no nos metíamos en la cama se desconectaría por su cuenta.

Con el genuino, el inimitable, el genio, George R. R. Martin, alma de la fiesta.
Palabras textuales: "El Rey Trasgo mola tanto como Canción de Hielo y Fuego, oye".
Tal cual os lo digo.

Al día siguiente, afectuosas despedidas, buenos deseos y abrazos para poner punto final a unos días inolvidables. Ha sido una experiencia irrepetible que me acompañará siempre, y por ello quiero agradecer a todos los que lo han hecho posible: mis padres, Eugenia -te quiero-, Carmen y Sergio, Bárbara y Juan, Carlos, Lis, Desirée, Andrea, Mamen, Elena, Helena, Fer, Diego, Jesús, Guillem, Cristina, a todos los asistentes, los lectores que se hicieron con sus copias de El Rey Trasgo -espero, de corazón, que las disfrutéis- y a George R. R. Martin por atraer a tanto público, sin el cual el Celsius 232 no hubiese sido posible.

Cristina Macía, artífice del evento, ojiplática ante su Rey Trasgo dedicado.
Trasguius 232, el evento que más dará que hablar. Permanezcan atentos.

1 comentario:

  1. Guau!!qué pedazo de crónica, casi me he sentido allí, lo cual se agradece un montón. Enhorabuena y gracias por compartir la experiencia. Por cierto, qué dedicatorias más curradas te marcas ;)

    ResponderEliminar